Este viernes, la Comisión Esquinense de Pesca (COESPE) llevará a cabo una reunión clave en la que se formalizarán las renuncias presentadas por algunos de sus miembros principales. En el encuentro, se prevé la aceptación de la renuncia del tesorero, Jorge Cortés, mientras que las renuncias del presidente José Delfabro y del vicepresidente José Levechi no serán aceptadas. Con esta decisión, la COESPE pretende mantener la continuidad de su equipo y asegurar la organización de la próxima edición de la Fiesta Nacional del Pacú, uno de los eventos más esperados en la región.
No obstante, surgen nuevas tensiones alrededor de la gestión de esta fiesta. Según fuentes cercanas, el Club Náutico y Pesca Brown, entidad propietaria de la Fiesta Nacional del Pacú, estaría mostrando interés en asumir el control de su organización. Este interés, sin embargo, no se limitaría únicamente a la gestión de la fiesta, sino también a los recursos financieros que la COESPE ha acumulado en caja, especialmente a partir del éxito alcanzado con la organización de la reciente Fiesta Municipal del Dorado.
Para la COESPE, este cambio podría suponer una amenaza a la estabilidad del evento y al uso de los fondos recaudados, los cuales, hasta ahora, han sido destinados íntegramente al crecimiento de las actividades pesqueras en la localidad y al fortalecimiento de la organización de eventos de pesca. La postura del Club Náutico y Pesca Brown, sin embargo, plantea interrogantes sobre el futuro de la Fiesta Nacional del Pacú y sobre cómo podrían gestionarse estos recursos en caso de que la organización cambie de manos.
La reunión del viernes promete ser un momento clave, ya que definirá no solo la estructura interna de la COESPE, sino también el rumbo de la próxima edición de la Fiesta Nacional del Pacú, y posiblemente, la administración de los fondos que la comisión ha logrado reunir a lo largo de sus actividades.