José Ottavis ha sido el centro de una importante denuncia que lo acusa de varios delitos graves, incluyendo asociación ilícita, defraudación contra la administración pública, negociaciones incompatibles (artículo 265), malversación de caudales públicos (artículo 260), enriquecimiento ilícito (artículo 268 inciso 1), así como abuso de autoridad y violación de los deberes de función pública (artículo 248). Junto a figuras destacadas como Fernanda Miño, Juan Grabois, Eduardo Montes y Marta Ferraro, Ottavis se enfrenta a una investigación judicial que podría tener repercusiones significativas en su carrera política.
La denuncia fue presentada por Jeremías Rodríguez, de la Asociación Civil Queremos Luján, quien señaló irregularidades en el manejo de más de 7.464 millones de pesos pertenecientes al Fondo de Integración Socio Urbana (FISU). Este fondo es esencial para la financiación de obras sociales y urbanísticas, lo que añade gravedad a las acusaciones de defraudación y enriquecimiento ilícito.
La causa está siendo investigada en el Juzgado Criminal y Correccional N° 1, bajo la dirección de la jueza María Servini y el fiscal Eduardo Stornelli. Ottavis, reconocido por su papel como fundador de la organización Amarte Argentina, ahora enfrenta serios cuestionamientos sobre su conducta y su relación con los fondos públicos.
Además de las implicaciones legales, la situación de Ottavis se complica por su posición dentro del Partido Justicialista (PJ). Actualmente, figura como consejero suplente en la lista encabezada por Cristina Kirchner, quien busca la presidencia del partido en las próximas internas. Este contexto político genera tensiones, ya que su situación legal podría influir en la percepción pública y en su capacidad para participar activamente en la política del PJ.
La cercanía de las internas del PJ, junto con las acusaciones en su contra, crea un panorama incierto para Ottavis. La posible intersección entre su defensa en la justicia y su aspiración política será un tema de interés en los próximos meses, mientras el partido se prepara para las elecciones internas y la comunidad política sigue de cerca el desarrollo de este caso judicial.
Este escenario pone en el foco la provincia, ya que José Ottavis ha regresado a Corrientes y, gracias a sus conexiones a nivel nacional y su cercanía con Cristina Kirchner, se posiciona como una figura clave en el manejo del peronismo correntino. Su influencia dentro del partido podría ser determinante en las próximas internas, dado que su relación con la expresidenta le otorga un respaldo significativo que podría facilitar su control sobre la estructura del PJ en la provincia. Esta situación genera expectación sobre cómo Ottavis podría utilizar su poder en el contexto político actual, especialmente en un ambiente electoral tan competido como el de Corrientes.